Fútbol Profesional
Títulos: Campeonato 1946
En 1945 habían llegado Armando Farro (de Banfield) y René Pontoni (Newell’s) y ya estaba en el club el gran Rinaldo Martino. La Reserva que venía de ser campeona y prometía muchísimo: la llamaban La Orquesta. Despiertos para no desperdiciar las bondades del semillero, el técnico Diego García y su ayudante Pedro Omar, no dejaron pasar de largo la oportunidad de exprimir ese diamante en bruto. Por eso promovieron al arquero Mierko Blazina, nacido en Trieste, ciudad que perteneció alternativamente a Italia y a la vieja Yugoslavia. Además del Flaco, subieron Héctor Tablada y Luis Mariano. El equipo ya contaba con otro pibe de la cantera, que se había afianzado en la defensa por estilo y presencia: José Pepe Vanzini. Como si faltara algo, a él se acopló Oscar Basso, otro grande. En la previa al torneo del 46 todo era optimismo. El Ciclón tenía los nombres, faltaba plasmarlo en la cancha. El sueño del título era muy real. Y, para darle el toque que faltaba, se contrató a Oscar Silva, un puntero izquierdo que venía de Racing.
No es casual que este equipo haya quedado en el ojo clínico de los argentinos, hinchas o no del club. Los números, muchas veces, son el mejor resumen: convirtió 90 goles en 30 partidos, es decir, un promedio de tres por fecha. Obviamente, esto refleja la vocación ofensiva. Era un equipo exquisito, técnico, de buen pie, armonioso para la vista. Resultó campeón con 46 puntos, cuatro más que Boca. Dejó su huella por el gran Trío de Oro, imparable, avasallador: del total de goles, 55 fueron del terceto, 20 de Pontoni, 18 de Martino y 17 de Farro. Luego de una primera rueda en la que terminó segundo, detrás de River, se destaparía para aplastar rivales: ganó 12 partidos (incluso a River y Boca) y perdió sólo uno, ante Estudiantes. En el medio, le hizo siete goles a Rosario Central, seis a Atlanta y cinco a Racing, Lanús y Platense. Al final, terminó coronado con 20 partidos ganados, seis empates y apenas cuatro derrotas.