El Ciclón debía afrontar una parada más que complicada, pero al mismo tiempo importante. Por el rival de turno, por la instancia y para también poder revalidar todo lo realizado a lo largo del campeonato. Con un gran marco de público que acompaño a los pibes, el escenario fue el ideal para vivir el clásico.
Cada pelota se disputó como la última. Friccionado y con la tensión que ameritaba, así fue gran parte del partido. En la primera parte no se pudieron sacar diferencias y por eso se fueron al descanso 0-0.
En el segundo tiempo la tónica fue bastante similar a la de los primeros 45 minutos. El quiebre se dio a tan solo cuatro minutos del final. Branco Salinardi, quien ingresó desde el banco, fue el autor del gol que le dio la clasificación a San Lorenzo para estar entre los cuatro mejores de la Copa.
Todo fue alegría y carnaval. El festejo entre los jugadores, cuerpo técnico y los hinchas que habían dicho presente para empujar al equipo. ¿Qué es lo que viene? Unión este jueves a las 18 en el Estadio Pedro Bidegain. ¡Vamos, vamos los pibes, siempre!