Se extraña competir. Claro está. Pero este período de entrenamientos sirvió para afianzar el grupo de Reserva y que los más chicos se vayan integrando de a poco al grupo de jugadores que venía trabajando día a día. Además de las practicas semanales contra la Primera División, los juveniles tuvieron una buena prueba de medida ante Banfield en el predio de la AFA donde, además, se probó el uso del VAR. El Ciclón ganó 2-0 con un doblete de Laureano Cabral. El delantero, categoría 2001, volvió a las canchas después de un año y medio sin jugar y cumplió con creces. ¡Bien, Pampa!
Los dirigidos por Alejandro Russo y Flavio Rocca formaron con Clemente; Lorenzón, Massino, Avalos; García, Riffa; Pérez, Porra, Leguizamón; Mallea y Cabral. Y después ingresaron Sosa, García y Silva.
El desarrollo del encuentro encontró a un San Lorenzo superior que, a pesar de tener varios jugadores divididos en distintas burbujas, pudo generar varias situaciones de gol con jugadas colectivas. De hecho, el primer tanto llegó por una buena asociación en el mediocampo que terminó con un pase filtrado para Cabral. El Pampa enfrentó al arquero y, con una gambeta cortita, eludió y definió con el arco en soledad. Un sello registrado del delantero azulgrana.
En el segundo tiempo, el Ciclón aumentó la ventaja de penal, otra vez con la firma del Pampa Cabral, que remató cruzado y engañó al arquero para el 2-0. El resultado sería definitivo, pero antes, Eduardo García marcó el tercer tanto que fue anulado por el VAR por posición adelantada.
La Reserva seguirá trabajando bajo las órdenes de Diego Monarriz y todo el grupo de trabajo a la espera que se confirme el regreso a la competencia. Mientras tanto, gritamos fuerte: ¡Vamos Los Pibes!