Fue una gran victoria. Y tuvo de todo. El Ciclón salió con todo desde el arranque, decidido a llevarse el tercer triunfo consecutivo. Lucas Pérez abrió el partido con 5 puntos rápidos que marcaron el camino, aunque el equipo formoseño reaccionó y achicó la diferencia a solo dos puntos (12-10). A pesar del empuje visitante, los de Boedo cerraron el primer cuarto con un sólido 33-20.
En el segundo cuarto, San Lorenzo siguió apostando por los tiros de tres y logró mantener la ventaja, aunque sobre el final La Unión ajustó su ofensiva y redujo la brecha a 8 puntos (49-41).
Después del descanso, los dirigidos por Leo Costa volvieron con una gran puntería desde el perímetro. Selem Safar, Gastón Córdoba y el capitán Lucas Pérez estuvieron certeros y el Ciclón llegó a sacar 14 puntos de ventaja (64-50). Pero Owens, una pesadilla para la defensa azulgrana, acercó a los formoseños con un 72-66 que dejó todo abierto para el cierre.
El último cuarto pudo haber sido para cualquiera. La Unión metió un parcial de 6-0 e igualó el partido. Pero San Lorenzo, con corazón y cabeza fría, logró retomar la delantera por la mínima. En los minutos finales, los locales ajustaron las marcas, acertaron en ataque y sellaron una diferencia de 5 puntos para cerrar el encuentro y festejar un triunfo que vale oro.
El Ciclón sigue en racha y se ilusiona con más. ¡Vamos, San Lorenzo!